El respeto a sí mismo

El respeto a las personas siempre ha ocupado una buena cantidad de comentarios, en todos los ámbitos, y sin embargo, muchas veces parece que se olvida muy fácilmente lo que de un modo u otro se ha jurado jamás quebrantar.

Es posible que los tiempos modernos hayan confundido un poco las formas, pero creo que los valores siguen siendo los mismos, el respeto al sexo femenino sigue vigente y el respeto a los mayores no se ha perdido del todo.

Los atentados a la integridad de una persona, equivale a perderse el respeto a uno mismo y eso ha existido desde siempre, con las variantes que usted  imagine, pero en el fondo se sigue respetando a la mujer por fortuna.

La masonería no ha estado ajena a la exaltación femenina, por ello diseñó una celebración en la que hace una apología de la mujer, con lo que demuestra lo grandioso que es el papel femenino, en el proceso de generación.

En dicha celebración, además de centrar los diálogos y comentarios en función de la mujer, se le encarga que sea la portadora del saco de beneficencia, con el que debe ejercer una obra de caridad  con entera libertad.

Permítaseme hacer una reflexión del concepto “madre logia”, decir que es el lugar donde nace cada uno de los candidatos a la masonería, parece que no estoy alejado de la realidad, ya que es necesario que de alguna manera se obtenga el símbolo adecuado del ingreso.

Madre logia no es un título al azar, es toda una tesis de lo que significa la maternidad, una  madre logia contará con tantos hijos  como sea capaz de entregar a la sociedad como ley natural, los mayores emigrarán con la idea de formar una nueva familia.

No importa que los tiempos modernos hayan modificado la manera de ver a la mujer, con el asunto de la liberación femenina, ya que se trata de una evolución casi automática, fueron muchos años de relegar a la mujer.

Por fortuna dentro de la masonería continúa la promesa o juramento de respetar a la mujer en la figura de madre, esposa o hermana, acatando de alguna manera, los mandatos divinos, al hacerlos suyos en toda su magnitud.

Es claro que la masonería respeta y respetará siempre la libertad de creencia, la libertad de culto, siempre que no interfiera con la paz pública, alterando el orden.

Sigo pensando que permanezco en actitud romántica y gusto de enviar flores como lo dice una canción, además de tratar de mantener el respeto a las damas ante cualquier situación.

Es prudente que cuando usted reciba una invitación a la llamada ceremonia de “tenida blanca” donde todo cuanto se trata en ese día, es la exaltación del sexo femenino.

Es necesario que se siga manteniendo el respeto amplio y cumplido a la mujer, porque si respetamos a la mujer de todas las maneras posibles, nos estamos respetando a nosotros mismos que es lo que hace grande y hermosa a cualquier sociedad.

La próxima vez que vea a una mujer, recuerde que puede parecerse a la que le espera en su casa, o a la que trata de crecer con la candidez propia de la juventud, de esa forma se estará respetando a si mismo.