lunes, 16 de abril de 2012

Imágenes y realidad

filosofía,arte,ciencia,cultura

Por: Julio Torres
Los fenómenos místicos y psíquicos resultan muy atractivos para muchas personas y entusiasman tanto que de inmediato surgen deseos de obtener resultados que luego traducen o interpretan como experiencias cósmicas cuyo fundamento solo es fisiológico.
El escuchar un sonido extraño supone que se trata de un mensaje y en circunstancias o condiciones inusuales, refieren que se trata de una señal o al menos un mensaje psíquico que bien puede convertirse en una exageración de prácticas supersticiosas.
Resulta desafortunado para muchas personas con tendencia al misticismo o a los fenómenos psíquicos se ilusionen cuando que es más recomendable prepararse antes adquiriendo una instrucción sencilla o básica en psicología, fisiología y en las ciencias físicas antes de incursionar en los aspectos superiores de la existencia del ser humano.
Muchas veces percibimos colores o imágenes que no tienen un duplicado exacto fuera de nosotros mismos y ni siquiera están relacionados en ese momento con una impresión visual externa y no por ello son psíquicos en el sentido literal, puede tratarse de lo que se conoce como imágenes consecutivas.
Debemos interpretarlo como una repetición inmediata de sensaciones causadas por algo similar que se ha visto y que queda grabado aún después que desaparece el estímulo que produjo la sensación, las imágenes consecutivas se distinguen en dos clases: Negativas y positivas y se menciona que las negativas son las más comunes.
Cuando fijamos la mirada intensamente en un objeto de colores durante 30 segundos y luego cambia la vista hacia otro lado a un fondo neutral, tal vez con pintura color pastel, aparecerá  la misma imagen, pero con distinto matiz, apreciaremos que las imágenes negativas permanecerán grabadas durante algunos minutos antes de desaparecer totalmente.
Las imágenes consecutivas positivas tienen el mismo color y brillantez que el objeto que se percibió originalmente, pero solo duran dos o tres segundos, las imágenes negativas son causadas por un intenso estímulo del nervio óptico, parecido a lo que ocurre cuando contemplamos fijamente una luz brillante cerca de nuestros ojos.
Podemos deducir que las imágenes consecutivas negativas son producto de la continuación del estímulo original y aunque las imágenes consecutivas positivas son causadas algunas veces por impresiones visuales verdaderas, pueden ser también producidas por estímulo artificial.
Una fuerte presión sobre los parpados pueden producir ante los ojos ya sean diseños o figuras geométricas de varios tonos brillantes tal vez de rojo profundo o verdes conforme a la experiencia de quien lo percibe, los cambios súbitos en la temperatura y los movimientos del cuerpo pueden provocar que se retenga una imagen durante mucho tiempo después que el estímulo ha terminado.
Por todo lo anterior, considero que no debemos confundir los términos, todo cuanto se ha descrito son fenómenos físicos y no experiencias psíquicas.
Existe una manera de comprobar lo expuesto en este escrito, se puede experimentar siempre que no exista padecimiento alguno en los ojos o por prescripción médica y se realiza con luz normal, se presiona el parpado derecho con la yema del dedo índice derecho.
La misma operación con el parpado izquierdo con la yema del dedo índice izquierdo, y a medida que se ejerce una determinada presión sin provocar daño a los ojos, habrá que hacer una rotación en ambos ojos con los dedos de manera circular, observaremos entonces los diversos colores brillantes y las imágenes consecutivas positivas resultantes del estímulo.
Dejaremos el tema en este punto y le invito al siguiente artículo, en el que expondré la diferencia que existe entre la realidad como la percibimos y la forma de interpretarla.