Decreto de Felipe IV
“Nos, Felipe IV rey de España y sus
posesiones, ungido por derecho divino ordeno, que es mi real voluntad que el
excelentísimo Señor Don Juan de Palafox y Mendoza cumpla mi deseo, destituir
como Virrey de la Nueva España al Séptimo Duque de Escalona, lo haga detener y
le practique principalmente el juicio de residencia que corresponde a todo
representante de la corona al termino de sus funciones, ya que una vez válido
su dictamen lo haga venir a mi presencia donde se decidirá su destino” firmado
y sellado en el Palacio Real de Madrid el 26 de noviembre del año 1600 y
cuarenta y dos. Felipa IV Rey de todas las Españas.
Don Juan sentado frente a ellos, como si
se tratara de un enjuiciado se siente inmune porque ellos ignoran que trae
consigo como un as bajo la manga cédulas reales que aún no exhibe y escucha
primero razones, entonces, el capitán general señala: “Esta Honorable
institución que ha costado más de un siglo conformar, por mi conducto pregunta
a vos, Excelencia, ¿Por qué ha ignorado a este tribunal en la deposición del
Virrey? Por sabido tenemos que sois poseedor de Ordenes Reales, pero nadie aquí
las ha visto, ¿Cómo confiar en vos, si no nos tomáis en cuenta?
Luego de un instante que pareció eterno,
Don Juan de Palafox contesta: “Deseo dar respuesta a vuestro punto de vista,
mediante esta otra cédula Real que disipará cualquier duda que surgiere”, acto
seguido, el presidente de la Real Audiencia recibe un rollo de pergamino, todos
aguardan expectantes la lectura en voz alta: “Nos, Felipe IV Rey de España y
sus posesiones, ungido por derecho divino, que es mi real voluntad que: Don
Juan de Palafox y Mendoza sea el nuevo Virrey en sustitución del séptimo Duque
de Escalona”. El presidente tiene que releer el final del texto porque la
sorpresa le hizo bajar el tono de su voz y porque los asistentes se lo
pidieron.
De momento ignoran que Don Juan de
Palafox y Mendoza, a partir de ese momento
ejercerá sobre la Real Audiencia una justa presión que culminará con una reforma que a nadie gustará por su rigidez y que de seguro provocará algunas renuncias. Con su triunfo, Don Juan sabe que junto con su triunfo momentáneo ha ganado muchos enemigos, pero los tiempos exigían la deposición del Duque de Escalona y alguien debía tomar ese riesgo, creo que solo una figura como la de Don Juan de Palafox y Mendoza era capaz de tal encomienda.
ejercerá sobre la Real Audiencia una justa presión que culminará con una reforma que a nadie gustará por su rigidez y que de seguro provocará algunas renuncias. Con su triunfo, Don Juan sabe que junto con su triunfo momentáneo ha ganado muchos enemigos, pero los tiempos exigían la deposición del Duque de Escalona y alguien debía tomar ese riesgo, creo que solo una figura como la de Don Juan de Palafox y Mendoza era capaz de tal encomienda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario